Según
el diccionario de la Real Academia Española uno de los significados
de el Protocolo es "La regla ceremonial diplomática o palatina establecida por decreto o por costumbre".
Así,
el Protocolo oficial o legal (basado en normas y leyes) se reduce al
ámbito de la Corona, el Gobierno, las Administraciones del Estado,
las Comunidades Autónomas y las Corporaciones Locales.
Pero el Protocolo también engloba otros términos como la etiqueta o el ceremonial, los cuáles sientan las bases fundamentales para la preparación, organización y ejecución tanto de actos oficiales como privados.
En
los actos privados, organizados por empresas o instituciones, el
Protocolo no impone pero sí aconseja, proporcionando pautas, por lo
tanto y puede decirse que en estos casos esta normativa no es de
obligado cumplimiento.
Es evidente que todo acto, ya sea público o privado, debe ser llevado a cabo con una buena organización, pero sin caer en la rigidez y dejándonos llevar siempre por el sentido común.
No
hay que olvidar, y en palabras del Señor Vilarrubias (experto en Protocolo) que el Protocolo es una ciencia, ya que trata temas
referentes a la diplomacia, la historia, la heráldica …, y al
mismo tiempo un arte, porque trata de conjugar la armonía, la
estética, el estilo, etc.
Eva
Sánchez
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